Recuerdo la primera vez que los vi, cuando siendo sólo un niño recorría el Museo Nacional de Historia Natural en compañía de mi madre. De pronto, me encontré frente a frente con la imponente representación de un hombre desnudo. Tenía el cuerpo completamente pintado y llevaba una extraña mascara que ocultaba su rostro. La imagen era impresionante, misteriosa; me cautivó por completo. Los Selk`nam o indígenas Onas; hombres fuertes y de privilegiada estatura, vivieron en el gélido extremo sur de Chile. El glacial clima no les impidió despojarse de las pieles de animales que usaban como vestiduras, para representar a sus dioses de esta enigmática forma. Por desgracia, su raza se encuentra extinta, dejando solamente algunas añejas fotos y filmaciones como registro de su existencia. Los invito a investigar sobre ellos para empaparse de su mágica cultura.
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